La cantidad de preguntas es siempre inagotable:
P: ¿Puedes describir las etapas generales en la senda espiritual?
R: Sí. Ya hice así en mi Svātantryasūtravṛtti I.9 (sí, el Sánscrito allí es intimidante, pero la traducción está en claro castellano), no obstante puedo expandir mi explicación aquí. Analicemos las tres categorías de aspirantes nuevamente entonces:
Principiante o novato: Son personas ordinarias pero que buscan una salida a sus sufrimientos, es decir, a la esclavitud. De todos modos, buscan su salvación aún cuando podrían estar felices con su vida mundana (ésta es la diferencia entre principiantes en espiritualidad y el resto de la gente ordinaria que generalmente busca a Dios solamente en tiempos de desgracia). Ahora, este principiante “supone” que tiene un intelecto correcto para razonar acerca de la Más Alta Realidad. Ésta es una de sus características, a saber, la ausencia de un intelecto apropiado para razonar acerca del Ser. Otro rasgo suyo es que constantemente pone al individuo limitado en primera posición, p. ej. si su nombre es Juan, él pondrá a Juan todo el tiempo en primer lugar, y al Ser en segundo lugar, por supuesto. Como es una persona ordinaria pero con un toque de espiritualidad, por decirlo de algún modo, aún se comporta en la vieja e ignorante manera a causa de su total incapacidad.
Cuando estos aspirantes se enteran de que son el Ser, comienzan a proclamar esa verdad siempre. Pero, meramente saberlo nunca es suficiente sino que uno debería tener una verdadera captación (darse cuenta) del Ser para que su declaración sea absolutamente contundente. Además, también se les enseña que puesto que son el Ser, deberían “fluir” como el Ser y no ser “rígidos” como el ego. Por supuesto, no pueden fluir así debido a su inherente incapacidad y falta de captación del Ser, pero suponen que diciendo que “ellos están fluyendo”, ellos están realmente fluyendo. ¡Los principiantes son tan graciosos! Nunca son debidamente responsables ni incurren en ninguna falta, pese a su comportamiento absolutamente desopilante, pues son novatos en espiritualidad. La responsabilidad comienza cuando uno ingresa al menos en la categoría de aspirante intermedio. Más sepa uno, más comprenda uno, más reciba uno de la Más Alta Realidad, más responsable es. Estos principiantes no pueden ser castigados jamás por su comportamiento e infantil modo de pensar sobre la espiritualidad entonces. Soy mayormente muy compasivo con los principiantes en espiritualidad, todo el tiempo tratando de guiarlos y tolerando su tonto razonamiento/comportamiento. Los trato como a niños, porque son niños en espiritualidad realmente. Los falsos gurú-s arruinan los sistemas de los principiantes a través de su tontería, y después es muy difícil arreglar ese lío. De ahí que “no esté fascinado” con estos tontos gurú-s falsos.
P: ¿Qué es un niño en espiritualidad?
R: Por ejemplo, como no tiene el intelecto correcto para razonar sobre el Ser, muy a menudo cae en manos de dudas tales como: “Si mi gurú es un liberado, ¿por qué no puede hablar en castellano todavía?” o “Si es una encarnación del Ser Supremo, ¿por qué tiene que ir al dentista entonces? ¿Por qué no meramente cura las caries a través de sus poderes sobrenaturales?” o “Si yo soy el Ser, ¿por qué tengo goteras en el techo? Debería tener en cambio un techo maravilloso… ¿no soy el Ser después de todo?” o “Mi Ser no es tan grande como el Ser de mi gurú porque aún soy discípulo” o “Cuando alcance Liberación Final veré al mundo y lucirá para mí totalmente azul” o “Ahorraré una pila de dinero para reunirme con mi gurú que vive exactamente en el rincón opuesto del planeta” o “Tomaré cada curso disponible en esta comunidad, porque más cursos tome más iluminado me volveré”, jajajajaja, ¡muy divertido por cierto! He oído cosas como ésas a lo largo de los años, y por supuesto, cuando era un novato he tenido pensamientos similares que me desconcertaban por completo en esa época. A despecho de que todo esto es gracioso desde mi punto de vista, sé que para un principiante todo lo previo es un asunto muy serio, jajaja. Oh estos niños, los adoro.
Después, está la categoría de aspirantes intermedios.
Intermedio: Verdaderamente, lleva algo de tiempo volverse un aspirante intermedio. Tanto los principiantes como los aspirantes intermedios comparten una característica común: Están totalmente apegados a su gurú humano, es decir, prestan demasiada atención a lo que el cuerpo/personalidad de su gurú hace o no hace. Este apego al gurú humano disminuye cuando el aspirante intermedio está en la última parte de esta etapa. Naturalmente comienza a dar más importancia a las escrituras que al gurú humano. Esto es así porque las escrituras están más cerca de él que el gurú humano. Y cuando se mueve a la categoría de “aspirante avanzado”, empieza a dar más importancia a su Ser que a las escrituras, porque el Ser es el núcleo de él mismo.
Bien, describiré algunas características de un aspirante intermedio. Ha empezado a desarrollar un intelecto que es adecuado para razonar acerca de la Más Alta Realidad. No es más el niño en espiritualidad, sino que ha evolucionado hacia una etapa donde está seriamente ocupado en la búsqueda de su meta espiritual. No lo desconciertan ya más las infantiles preguntas que constantemente dejan perplejos a los principiantes. Está lleno de actividades. Por ejemplo, en mi tradición: meditación, repetición del mántra, canto de mántra-s, adoración, etc. Es muy mecánico en sus prácticas, p. ej. medita mayormente con horarios y no espontáneamente como en el caso de un aspirante avanzado. Asimismo, repite el mántra como un robot, con escasa comprensión de su significado pese a las toneladas de teoría sobre mántra-s que tuvo que estudiar. Puesto que aún no tiene una verdadera captación del Ser por al menos un segundo, todo en sus rutinas está lleno de actos mecánicos, siempre con horarios y cosas así. Por ejemplo: “Repetiré el mántra mil veces en la mañana y usaré esta mālā o rosario para contar”.
Él sinceramente se esfuerza por lograr darse cuenta del Ser, pero luce como un pescador con una caña pequeña, en un botecito, tratando de atrapar un gigantesco cachalote. Sí, podría atraparlo tal vez, pero el problema yace en “¿quién está atrapando a quién?”. Por supuesto, él ignora que cuando venga el darse cuenta del Ser, será devorado por ese cachalote, jaja. Entretanto, puede saborear su momento de triunfo. Oh, este aspirante intermedio no tiene ni idea de lo que sucederá si insiste en tratar de pescar esa PRESA, jeje.
Cuando el inmenso bebito o bebecito (el cachalote o Ser) muerde su carnada, tira del hilo muy fuerte y el supuesto “pescador” termina en el agua. De todos modos, la ballena no lo devorará porque no es un alimento apropiado todavía. Lo prueba y lo escupe mientras dice: “Este alimento es de muy baja calidad. No está lo bastante maduro”. Recuerda que no es un cachalote ordinario sino uno divino, jeje. De esta manera, el aspirante intermedio experimenta al Ser pero en la forma de un vacío. El vacío es la consecuencia de la presencia de su impureza primordial (su falta de plenitud), a saber, el Ser lo rechaza porque no es apto todavía. Como no es “pleno” en el más verdadero sentido de la palabra, experimenta el estado de vacío durante sus prácticas. Para experimentar al Ser como Él realmente es, el pescador en el ejemplo tendrá que ser devorado por la gran ballena. A esto lo decide la “ballena” y NO el “pescador”. Esto es algo que el aspirante intermedio aún no puede captar a causa de que constantemente pone al individuo limitado en primera posición.
P: ¿Qué significa que él pone al individuo limitado en primera posición?
R: Por ejemplo, no necesitas ir demasiado lejos para ver eso. Existen muchos gurú-s por aquí. Puedo verlos a todos ellos online. Son mayormente aspirantes intermedios que juegan el rol de gurú-s por alguna extraña razón. De cualquier forma, están en todas partes ahora. Si observas su comportamiento, notarás que están todo el tiempo promoviendo su persona, o sea, al individuo limitado llamado Juan, Juana, etc. Por ejemplo, publicando una biografía “extremadamente detallada” acerca de todos sus logros y certificaciones o mostrando su cara “todo el tiempo” o exhibiendo vídeos donde él está todo el día y toda la noche “en el centro de todo”, etc. Ése es un muy buen ejemplo de poner al individuo limitado en primera posición. Están celebrando su individualidad y de esa manera están mostrando su ignorancia. Esto es muy usual. Esos aspirantes deberían dejar de enseñar así y en cambio esforzarse por moverse hacia la etapa de aspirante avanzado. Los benditos no se exponen de esa manera porque ponen al Ser por encima de todo constantemente.
Entonces, según el ejemplo dado, lo más importante es el “cachalote” y no el pescador. Además, es la ballena la que atrapará al pescador y no viceversa. Aún cuando el aspirante intermedio pueda saber todo eso teóricamente, fracasa en captar su verdadero significado. Cuando finalmente lo capta, es promovido a la categoría de “aspirante avanzado”.
P: Ser devorado por un cachalote no luce muy divertido.
R: Por supuesto, fue sólo un ejemplo. No obstante, en la vida real, la situación es aún peor, porque cuando pierdes tu cuerpo, eso es malo, pero puedes conservar tu ego de individuo limitado y tomar otro cuerpo en un nacimiento futuro. Muy por el contrario, cuando el Ser es captado, tu ego es reducido a cenizas y no hay retorno a su previa condición. Este proceso es muy infernal para el individuo limitado (la invención del Poder del Ser), pero no hay otro modo si vas por la Liberación Final. Afortunadamente, es gradual y lleva muchos años mientras el verdadero Hacedor (el Poder del Ser) ajusta el sistema acordemente.
La gente que piensa que el sendero espiritual está “solamente” lleno de risas no tiene ni idea de cuán infernal puede ser la completa transformación. Puesto que el individuo limitado debe ser elevado desde su condición de “sumisión” y “limitación” hasta el Estado del Ser que es una Ilimitada Masa de Libertad y Bienaventuranza, no es sorprendente si uno se topa con algunos obstáculos que se meten en su camino. No tengo dudas de que el individuo limitado es esencialmente el Ser y que todos estos obstáculos son también el Ser, pero desde el punto de vista del aspirante será infernal, por no decir más, ¿pero quién dijo que pescar cachalotes no era una tarea arriesgada?, jaja. Bromas aparte, como digo siempre, la Liberación Final no es para gente tímida. No se refiere a decirle a todos: “Yo soy el Ser”, sino a una captación real de esa Verdad. Para hacer así, tu individualidad debe morir primero, lo cual involucra muchos sufrimientos. El propio ego será transformado en algo distinto durante el proceso. El aspirante intermedio, durante esta etapa, comienza a tener una vislumbre de su futuro en espiritualidad y se entera de que la tarea será muy seria. No es más un feliz e inocente principiante, sino que está en camino a convertirse en un aspirante avanzado. Existen muchos momentos de depresión durante este proceso, pero mediante Su Gracia es de algún modo conducido hacia la próxima etapa.
En definitiva, los principiantes y los aspirantes intermedios son como pescadores con una cañita y un botecito, todo el tiempo bregando por pescar al Ser que es como un gigantesco cachalote. Por supuesto, terminarán devorados por la ballena y con el bote totalmente hundido, pero no lo saben todavía. Aún si lo supiesen en teoría, no pueden comprenderlo en la práctica hasta que arribe la etapa de aspirante avanzado. Están mayormente atrapados por el sentido de autoría y por dicha razón están “pescando” al cachalote con una pequeña caña y un pequeño bote. En este sentido, son completamente ilusos, de ello no hay duda alguna.
Avanzado: Se alcanza esta etapa cuando Su nivel de otorgamiento de Gracia es enorme. En general, lleva mucho tiempo llegar aquí. En mi propio caso, me tomó unos 22 años y pico, de los cuales 14 transcurrieron en comunidades con todo el chismorreo, dramas, viajes del ego, situaciones extrañas y cosas así. Al decir eso, tácitamente indico que “un aspirante debe ser muy paciente y perseverante siempre”. Finalmente, pude aislarme de todo ese ruido y aplicar toda mi atención al Ser únicamente. La etapa en “comunidad” o “grupo” es una fase necesaria en la evolución espiritual en términos generales, pero al final el aspirante tendrá que recluirse de alguna manera para darse cuenta de su Ser completamente. ¿Por qué? Porque durante la etapa avanzada incluso el propio cuerpo físico se siente a veces como una distracción, entonces la presencia de demasiada gente alrededor será todo un dolor de cabeza para ese aspirante. Inclusive en el caso de que tal aspirante viva en una comunidad, permanecerá en aislamiento en líneas generales. No está interesado en lo más mínimo en estar con otra gente.
El aspirante avanzado es uno que finalmente captó que no es el pescador/cazador sino la “presa”. También comprendió que su cañita y botecito no pueden dar abasto con la tarea de pescar a un inconmensurable y divino cachalote, jajaja. Me río, pero el proceso es muy triste porque se quita al ego de su posición de súper estrella y se lo reemplaza con el Ser. Este tipo de aspirante pierde todo su interés en gurú-s humanos pues su atención está más en las escrituras y finalmente en el Ser Mismo, como expliqué con anterioridad.
El aspirante avanzado termina en el agua como el aspirante intermedio cuando el gigantesco cachalote muerde la carnada y tironea del hilo, pero esta vez la divina ballena devorará al aspirante ya que ahora es comida de muy alta calidad. Siguiendo con el ejemplo entre un pescador y un cachalote, podría establecer que la etapa entera denominada “avanzada” es una asimilación de la supuesta individualidad del aspirante “dentro” del cuerpo de la ballena. Cuando se asimila totalmente el alimento, eso es Liberación Final porque el aspirante se hace uno con el Ser (es decir, con la ballena en el ejemplo). Fue siempre uno con el Ser, pero no tenía una verdadera captación (darse cuenta) de su naturaleza esencial. Cuando tiene al final esa captación, es un liberado, o sea, llegó a darse cuenta del Ser.
El aspirante intermedio junto con el principiante realizan sus prácticas de manera mayormente “externa”, pero el aspirante avanzado practica todo “internamente”. Es capaz de entender al Ser dentro y por consiguiente se hará apto para la Liberación Final tarde o temprano. Es sólo cuestión de tiempo. Sus prácticas no son más mecánicas sino espontáneas, es decir, medita solamente cuando la meditación viene a él por sí misma y no con horarios. Hacia el final de esta etapa, abandona todas las prácticas pues se da cuenta de que el brillante sol no puede ser iluminado por una vasija. Su logro de la Liberación Final ocurre espontáneamente también, de repente. Cuando el Ser se le revela, ése es el final de su trasmigración desde un cuerpo hacia otro cuerpo, desde un pensamiento hacia otro pensamiento, etc. Tal persona ha atravesado por una total transformación porque en él el Ser (y el Ser únicamente) permanece. Incluso lo que se llama ego atravesó por una completa transformación y pese a que luce como un ego usual no es como el ego anterior ya más.
Desde ese momento en adelante, el liberado vivirá como cualquier otra persona o bien se volverá un gurú espiritual. Su Bienaventuranza está totalmente segura en el Ser y en consecuencia él puede permanecer feliz en todas las circunstancias. No, no está riendo todo el tiempo como un idiota. La Bienaventuranza no es siempre sinónimo de reírse (este malentendido se ve comúnmente). Por ejemplo: Si su hijo muere, no se estará riendo durante el funeral como un idiota, porque experimentará sufrimiento también. De todos modos, su Bienaventuranza terminará por dominarlo y la tristeza será por último descartada. Pero su comportamiento lucirá usual para no perturbar a otra gente. La idea de un liberado siempre riendo como un tonto es común pero completamente falsa. Para no revelar su estado de Liberación, debe jugar todos los roles como una persona ordinaria. O bien, si es un gurú espiritual y uno de sus discípulos viene y le cuenta acerca de su pérdida familiar, no reirá y dirá: “Eh, eres el Ser y todos son el Ser. ¿Cuál es tu problema entonces?”. ¿Por qué? Porque si el discípulo es principiante o intermedio, no entenderá su comportamiento. Sólo los aspirantes avanzados podrían comprenderlo, pero como estos son muy pocos siempre, el liberado “generalmente” se comportará en un modo que sea apropiado para no perturbar a otras personas.
Otra característica de un liberado es que no interferirá con los movimientos del Ser en sí mismo. Por ejemplo: Ahora su mente está enojada y él le permite estar así. No lucha con ella sino que más bien le permite al Ser tener Su deleite de esa manera. Y si su mente siente miedo, le permite sentir así. Está verdaderamente “fluyendo” con el Ser y su “fluir” no es mera declaración como en el caso de los principiantes en espiritualidad. El comportamiento de un liberado está más allá del alcance de la mente. Como resultado, es muy difícil comprender sus modos de comportamiento. Una buena descripción de él, en este mundo de las palabras, sería decir que permite que Su Libertad Absoluta se exprese a Sí Misma en él. No interfiere con esta Libertad en absoluto. Los principiantes y los aspirantes intermedios son siempre “controladores”, pero el avanzado aprende a fluir con el Ser y Su Libertad. El liberado es sencillamente un aspirante avanzado que finalmente se dio cuenta de su divinidad, la cual está repleta de Bienaventuranza.
La Bienaventuranza, como establecí antes, no es mera felicidad o estar todo el día riendo o celebrando como tanta gente postula online y offline. Eso no es para nada cierto. La Bienaventuranza es un profundo Sentimiento de Verdadera Felicidad más allá de toda descripción. Esté o no esté el rostro riéndose, eso no tiene importancia, y de ello estoy totalmente seguro. La gente que cree que los santos son personas que están todo el tiempo riendo y celebrando no comprenden el real significado de la Bienaventuranza. La Bienaventuranza no es felicidad ordinaria pero “más grande”. NO. Bienaventuranza es la esencia misma de Su Poder. Es el Néctar Supremo que mantiene extático a un liberado dentro y fuera ya sea que su cara refleje o no ese Estado. Cuando se le permite al rostro reflejar Bienaventuranza, no es generalmente “reír” sino “abrir la boca” a causa del Asombro producido por Su Revelación. Oh bien, estos procesos serán explicados más adelante.
Tras la Liberación Final, y no antes, uno se da plenamente cuenta de que todo el proceso fue siempre “automático”: ignorancia automática, limitación automática, moverse automático desde una etapa hacia la otra, evolución automática, iluminación espiritual automática y así sucesivamente. Antes de la Liberación Final uno siente que uno está, de alguna forma, haciendo algo “por sí mismo”. Sin embargo, después de la Liberación Final, uno se da cuenta de que todo fue siempre llevado a cabo por Su Gracia y únicamente Su Gracia. De hecho, en el Estado del Ser no hay ni esclavitud ni Liberación sino Él Mismo solamente. Paradójicamente, se comprende esta verdad después de la Liberación Final porque antes de eso es sólo mera declaración. El Ser es tan Grande que puede volverse el individuo limitado en esclavitud y luego, en un santiamén, darse cuenta de Su propia naturaleza esencial nuevamente. No obstante, desde el punto de vista de un individuo limitado, el proceso entero de darse cuenta del Ser llevó muchos años de grandes esfuerzos. En esto Él exhibe Su Libertad Absoluta, porque aún cuando es completamente Libre, parece quedar atado por Él Mismo y luego liberado por Él Mismo también. ¿Quién podría ser tan Libre como Él? Nadie podría. ¡Mis salutaciones a este Gran Ser que es el verdadero autor de este artículo!